La estrategia de Abinader no solo busca deslegitimar a su principal rival, sino también definir claramente las líneas ideológicas que diferencian a su gobierno de cualquier alternativa, que no sea la derecha regional.
NEYBA, Bahoruco.- El presidente Luis Abinader ha puesto desde ya su mira en el ex presidente Leonel Fernández, al vinculándolo con el apoyo al “régimen” de Nicolás Maduro en Venezuela, “con cuya acusación busca debilitar la imagen de Fernández, al tiempo de consolidar su imagen como un líder de la derecha y que su gobierno también está alineado con los valores de la derecha”, a juicio del ex diputado Rafael Méndez.
Según el pasado congresista, el presidente Abinader en la pasada gestión centró su estrategia mediática en la situación de Haití, presentándose como un protector de la República Dominicana ante la inestabilidad en el país vecino, “pero en su segundo mandato parece haber identificado la necesidad de redirigir su enfoque para mantener y expandir su base de apoyo, “por lo que la ha emprendido contra Venezuela como su nuevo pivote mediático”.
“Este movimiento estratégico podría tener un doble propósito: desacreditar al ex presidente Fernández al asociarlo con un gobierno ampliamente criticado por la comunidad internacional, y por otro, reafirmar la identidad de su propio gobierno como un bastión de la derecha en la región”, subrayó.
Méndez consideró que la acusación contra el líder de la Fuerza del Pueblo podría ser vista como un intento de desviar la atención de los desafíos internos que enfrenta su gobierno, pero sin advertir corre el riesgo de que algunos sectores de la población podrían percibir su enfoque como una táctica oportunista.