Santiago.- Gran indignación ha causado en el paraje la Joya, sección Estancia del Yaque, de Navarrete, la muerte a tiros de un agricultor dominicano alegadamente a manos de un grupo de haitianos con el que había discutido.
El vocero de la Dirección Cibao Central de la Policía, con asiento en Santiago, coronel Jesús Cordero Paredes; identificó a la víctima como Miguel de la Cruz, de 61 años.
Cordero Paredes dijo que el cuerpo sin vida del agricultor fue encontrado en la finca de José Reynaldo Hernández, quien junto al haitiano Antonio Agustín están siendo investigados.
Otros haitianos, de acuerdo al portavoz policial, fueron apresados para fines de investigación, pero posteriormente se dejaron en libertad.
Cordero Paredes reveló que el occiso sufrió heridas de armas de fuego en los genitales y otras partes de su cuerpo.
Al lado del cadáver del señor de la Cruz, se encontró un arma de fuego de fabricación cacera. De acuerdo al coronel Cordero Paredes.
Comunidad tensa
Los pobladores de la Joya, en Estancia del Yaque, presumen que los autores de la muerte del agricultor pueden ser haitianos, ya que había discutido horas antes de ser asesinado con varios ciudadanos de ese país.
Residentes del lugar dijeron que en reiteradas ocasiones han pedido a las autoridades de Migración que procedan a repatriar a los haitianos que viven de manera irregular en esa demarcación.
Al lugar se presentaron miembros de la Policía Nacional, quienes arrestaron a varios haitianos y a un dominicano que están siendo investigados.
Con esta muerte suman dos los dominicanos muertos presuntamente por haitianos en comunidades de Santiago.
El pasado lunes, el agricultor Valerio de Jesús Salcedo fue muerto a machetazos por un grupo de haitianos con el que había discutido previamente en la localidad de Hatillo, San Lorenzo, del Distrito Municipal de la Canela, Santiago.
En represalia a ese hecho, los comunitarios expulsaron del lugar a los haitianos que viven en la zona.
Hace cerca de un mes que pobladores de Manga Larga, en La Vega, incendiaron dos casuchas y expulsaron a los haitianos que viven en esa localidad en represalia por la muerte de un dominicano de parte de un inmigrante de Haití.