Santiago.- Motivadas por las presiones que a diario reciben de organizaciones comunitarias, barriales y de habitantes de localidades y barrios de ciudades del norte del país, las autoridades de Migración hicieron dos operativos en las ciudades de Santiago y La Vega, donde apresaron a unos 128 haitianos indocumentados que fueron repatriados a su país.
La mayoría de los inmigrantes detenidos se dedicaban a pedir limosnas en las calles y otros a limpiar los cristales de los vehículos en los semáforos y lustrar zapatos en los parques y otras plazas públicas.
En la Vega, fueron detenidos 100 inmigrantes haitianos, que vivían de manera irregular en el país, mientras en Santiago, otros 28.
Muchos haitianos al enterarse de los operativos lograron escapar, pero otros no tuvieron la misma suerte y fueron arrestados y expulsados hoy a su país.
En la ciudad de Santiago, un inspector migratorio permitió que una haitiana indocumentada que fue arrestada en el operativo escapara, luego que ésta en medio de llantos lo sensibilizara al decirle que dejó en Haití tres hijos, cinco hermanos y su madre y su padre que está enfermo y que subsisten gracias a ella.
La inmigrante ilegal dijo que hace nueve meses emigró a República Dominicana de su pueblo natal de Troud del Nort, huyéndole al hambre y la miseria.
En ese contexto, manifestó que al emigrar a Santiago dejó a tres hijos suyo menores bajo el cuidado de su madre y su padre que está enfermo y de cinco hermanos, dos menores y tres mayores de edad que están sin trabajo y que todos dependen de lo que ellas gana en el país vendiendo frutas en las calles.
La haitiana manifestó que está ahorrando dinero para traer al país a sus hijos, sus padres y hermanos, porque según alega en Haití los pobres no tienen posibilidades de subsistir.
Otros de los inmigrantes repatriados advirtieron a las autoridades que buscarán la forma de regresar al país por la vía que sea necesaria, afirmando que en Haití no hay empleos ni comida y que sus familiares que dejaron en la vecina nación comen gracias al dinero que les envían desde República Dominicana.
Mientras Migración hizo estas redadas, hoy en la mañana, pobladores de Navarrete y los sectores de Cienfuegos cerca de una planta de gas y de la Joya, presenciaron a decenas de haitianos que apresuradamente se desmontaron de dos minibuses y un autobús al ser traídos de manera irregular desde su país.
Según dicen, muchos de los inmigrantes haitianos, en pueblos del norte y el noroeste de Haití, los traficantes de personas ilegales venden a la ciudad de Santiago como un lugar donde hay empleos y que la gente tiene muchas posibilidades de vivir porque no se pasa hambre.
Esto ha motivado que en los últimos años, Santiago haya sido receptora de una masiva presencia de haitianos indocumentados, lo que ya está creando conflictos con dominicanos en barrios y comunidades, cuyos lugareños han amenazado con expulsarlos por su propia cuenta si Migración no lo hace.
La muerte de tres dominicanos en los que se acusa a haitianos ilegales en las comunidades de Hatillo San Lorenzo y Estancia del Yaque en la provincia de Santiago y Manga Larga, en Cutupú, la Vega, provocó la ira de sus habitantes que reaccionaron expulsando a todos los inmigrantes del vecino país que vivían en esas demarcaciones.