La carrera de José Offerman como dirigente pudo haber llegado a su fin este sábado, luego de que derribara de un puñetazo a uno de los árbitros del presente torneo invernal dominicano.
Offerman golpeó con contundencia al árbitro Daniel Rayburn en medio de una acalorada discución.
Este incidente, unido a su historial de violencia en el terreno, puede que sea el punto final de su carrera dirigencial, por lo menos en el béisbol organizado.
Se recuerda que Offerman fue sometido a la justicia norteamericana y castigado por golpear con un bate al receptor Joe Nathans, en un partido de la Liga Independiente del Atlántico, luego de recibir un pelotazo del lanzador Matt Beech.
Por ese hecho una corte estadounidense sentenció a Offerman a someterse a un tratamiento para controlar su
temperamento.
LO APRESARON
Tras golpear al árbitro, Offerman fue apresado y llevado a un destacamento policial de Cristo Rey, de donde fue despachado esta madrugada.
Offerman fue apresado por el jefe de seguridad de la Liga de Béisbol, Frank Durán.
En el destacamento, el dirigente del Licey fue mantenido aislado en una oficina a la que solamente entraban oficiales y el Ministerio Público Bernardo Rodríguez
Aunque fue dejado en libertad, a Offerman se le advirtió que debe estar disponible por si es requerido por el Ministerio Público.
Todo comenzó cuando el árbitro de home plate Jason Bradley expulsó al receptor Ronny Paulino por supuestamente protestar conteo de bolas y strikes, fue entonces cuando ingresó al terreno Offerman para reclamar a Bradley y luego se sumó el árbitro de primera Rayburn, quien enfrentó a Offerman, por lo que este reaccionó con un golpe que lo tiró al suelo.
