Redacción Deportes.- La Federación Internacional, FIA, de Automovilismo publicó hoy los cambios en el reglamento del mundial de rallys en el presente año, una temporada que se prevé de transición entre la desaparición de los WRC, como vehículos punteros, y la llegada de los S2000, que ahora tendrán clase propia.
La FIA, con los cambios, pretende flexibilizar la disputa de las pruebas y hacerlas más cercanas a la afición, y da la libertad a los propios organizadores para que busquen alternativas para darle una mayor notoriedad en la actualidad deportiva.
Así, entre las novedades destaca el que este año las pruebas, un total de trece, aunque falta por confirmar la inclusión del rally de Bulgaria, podrán durar los días que los organizadores quieran, entre dos y cuatro días, aunque el último día, y por tanto del podio final, deberá ser o sábado o domingo.
Además, se incrementa el máximo de kilómetros cronometrados totales, que podrán estar entre 300 y 500 km. Además, si bien hasta ahora un rally debía ser de un tipo de superficie determinada ahora se podrá mezclar, incluso en una misma jornada. También se da libertad de horario, pudiendo celebrar tramos nocturnos, siempre que no pongan en riesgo la seguridad de pilotos y público, y no suponga el total de la jornada de competición.
El presente año será de transición entre el final de los actuales coches WRC y la llegada de los S2000 y S1600 con los que se disputará el mundial el próximo año. Así, la FIA ha decidido crear una nueva categoría denominada S-WRC en la que tendrán cabida estos vehículos. Constará de diez pruebas puntuables de donde los pilotos tendrán que escoger siete antes del inicio de la competición.
Además, ante la falta de marcas oficiales, sólo Ford y Citroën, la FIA, al margen del tradicional mundial de constructores donde pugnan los equipos que disputan el mundial completo, ha decidido crear un nuevo certamen denominado "campeonato WRC" en el que podrán competir los vehículos WRC con homologación anterior a 2009, donde tendrán la obligación de participar en al menos ocho pruebas.
La intención de esto es atraer al máximo número de pilotos privados posibles que si bien no disponen de asiento oficial, si que cuentan medios para competir con un vehículo WRC de algunos años para hacer el mundial, unas máquinas que el noruego Peter Solberg ya demostró la temporada pasada pueden estar al nivel de los mejores en algunas pruebas.
El escandinavo plantó cara a los oficiales en algunos tramos, y puso muy caro el podio en algunos rallys, con un Citroen Xsara de 2003 privado. La primera prueba del mundial será entre el 12 y 14 de febrero en Suecia, sobre nieve.