Washington.- La ex gobernadora de Alaska Sarah Palin, quien se perfila como la líder del movimiento conservador de EE.UU., apuntó hoy a una posible candidatura para las elecciones presidenciales de 2012.
En una entrevista concedida a la cadena de televisión Fox News, de la que es actualmente colaboradora, Palin, aseguró que sería "absurdo" que no se planteara presentarse a esas elecciones.
Lo hará, aseguró, si considera que es algo que vaya a beneficiar a su país y sea bueno para su familia.
"No voy a cerrar una puerta que quizás se me abra en el futuro", aseguró la ex gobernadora, quien se declaró dispuesta a enfrentar sus credenciales contra las del presidente de EE.UU., Barack Obama, "en cualquier momento".
La ex gobernadora de Alaska, muy criticada en la campaña de 2008 por su aparente falta de preparación, aseguró que sus intereses se han ampliado desde entonces.
"Espero que sí", respondió a una pregunta acerca de si tiene un mayor conocimiento de la política internacional y estadounidense hoy día. Sus asesores en Washington, aseguró, le envían informes diarios.
La ex candidata presidencial, que dimitió en 2009 como gobernadora de Alaska tras apenas dos años en el cargo -en una iniciativa que los analistas atribuyeron a su interés en preparar una campaña para 2012-, se ha convertido en la gran heroína y la líder "de facto" de los grupos estadounidenses más conservadores.
Sus insinuaciones sobre una posible candidatura parecen ir más allá de un simple coqueteo. Ya ha formado un Comité de Acción Política (PAC), el primer paso para el lanzamiento de una campaña y se ha mantenido en el radar de los medios de comunicación con el lanzamiento de una autobiografía y declaraciones contra el actual Gobierno.
Palin fue la pasada noche en un hotel de Nashville (Tennessee) la gran estrella de la primera convención del movimiento conocido como "Tea Party" y que agrupa a los sectores más derechistas del país, en lo que tuvo todo el aspecto del lanzamiento preliminar de una posible campaña.
En su discurso, el primero de gran alcance desde las elecciones de 2008, Palin recurrió a su peculiar estilo, que mezcla el sarcasmo con el populismo, para arremeter contra Obama y asegurar que las políticas de la actual Administración durarán poco.
Puso como ejemplo el triunfo, hace dos semanas, del republicano Scott Brown en los comicios parciales de Massachusetts -que ha arrebatado a los demócratas la mayoría absoluta en el Senado- y de sendos candidatos de ese partido en las elecciones a gobernador en Nueva Jersey y Virginia para asegurar que los conservadores ganarán escaños en las legislativas.
En particular, la ex candidata arremetió contra la política de seguridad nacional y aseguró: "necesitamos un comandante en jefe de nuestras tropas, no un profesor de derecho que nos dé lecciones desde un podio".
Palin y el "Tea Party" se han colocado a la derecha del Partido Republicano, inmerso en una búsqueda de identidad tras el batacazo electoral de 2008 y dividido entre conservadores y moderados, que recomiendan flexibilizar posturas en temas sociales como el aborto y los matrimonios homosexuales para atraer a un electorado más amplio.
El movimiento se ha apuntado algunos puntos políticos. A su presión se atribuye, en parte, la victoria de Brown, especialmente dolorosa para los demócratas por haberse producido en uno de los estados que consideran más "suyos" y por haber significado la pérdida de su mayoría absoluta en la cámara alta.
El "Tea Party" ganó visibilidad en abril del año pasado con la convocatoria de centenares de manifestaciones simultáneas en todo el país para protestar por el elevado gasto público por el que ha apostado la Casa Blanca para sacar al país de la crisis.
A partir de ahí, la corriente captó más adeptos y se acentuó su naturaleza partidista, situándose a la derecha del Partido Republicano.
Ahora busca promover candidatos conservadores en las elecciones de noviembre y para ello, desafiar en las primarias del partido republicano a aspirantes que consideren demasiado centristas. EFE