El ministro de Medio Ambiente, Jaime David Fernández Mirabal, admitió este martes que la mayoría de las plantas de agua residuales no funcionan en el país, a su juicio una gran debilidad del Estado.
Asimismo, Fernández Mirabal abogó porque se introduzca en el Código Penal el "ecosidio" o crimen contra la naturaleza.
Sostuvo que las aguas residuales no tratadas constituyen un gran peligro, ya que los desperdicios van a los ríos y acaban con las barreras coralinas del mar.
Reconoció que las sanciones han sido débiles, sobretodo para los industriales que prefieren poner una multa en lugar de mantener en funcionamiento las plantas de aguas residuales con el contaminante que vierten en sus empresas, ya que le resulta más barato.
De igual forma, Fernández Mirabal expresó que el que quema la un área boscosa afecta el presente y futuro de las generaciones. Puso como ejemplo un simple conúco se pierde un nivel de biodiversidad que no se recupera en 200 años.
En cuanto al ecosidio, el funcionario sostuvo que en el país todos exigen derechos, pero son pocos los que cumplen, sobretodo en lo referente a la protección de los recursos naturales.
El ministro de Medio Ambiente se expresó en esos términos en el programa "Hoy Mismo", del canal 9 de Color Visión.
