Tokio.- La aerolínea nipona Japan Airlines (JAL), que se declaró en bancarrota en enero, anunció hoy pérdidas de 177.980 millones de yenes (1.473 millones de euros) entre abril y diciembre de 2009, los primeros nueve meses del año fiscal japonés.
La cifra está muy por encima de las pérdidas del mismo periodo del año anterior, cuando la primera aerolínea de Japón registró unos números rojos de 1.920 millones de yenes (15,89 millones de euros), indicó el grupo.
La pérdida operativa entre abril y diciembre de JAL fue de 120.830 millones de yenes (unos 1.000 millones de euros), frente a los 8.860 millones de yenes (73,36 millones de euros) que perdió entre abril y diciembre de 2008.
Los ingresos se situaron en 1,14 billones de yenes (9.479 millones de euros), un 26,6 por ciento menos que en el mismo periodo del ejercicio precedente.
Abrumada por unas deudas de más de 18.000 millones de euros, la aerolínea declaró el pasado 19 de enero la que supuso la mayor quiebra no financiera en la historia de Japón.
Tras la bancarrota se abrió un proceso de reestructuración gestionado por el ETIC, una agencia paraestatal encargada de reflotar empresas en riesgo, que invertirá 300.000 millones de yenes (2.484 millones de euros) en la aerolínea japonesa.
Además establecerá, junto con el público Banco de Desarrollo de Japón (BDJ), una línea de crédito de 600.000 millones de yenes (4.968 millones de euros), aunque el actual administrador de JAL y representante del ETIC, Akitoshi Nakamura, afirmó hoy que quizás no será necesario utilizarla en su totalidad.
El proyecto de reflote de JAL incluye también la eliminación de más de un 10 por ciento de sus vuelos internacionales, el recorte de un tercio de su plantilla -15.000 empleados- y la reducción de un 30 por ciento en los planes de pensiones de sus empleados.
"JAL reconoce y lamenta profundamente la actual situación, que ha causado grandes inconvenientes y preocupaciones a nuestros accionistas, acreedores, clientes, proveedores y otros afectados", señaló el grupo en el comunicado que anunció sus pérdidas.
Añadió que la compañía trabaja muy de cerca con el ETIC, bajo supervisión judicial, para elaborar un plan "efectivo" que permita reconstruir la aerolínea, que durante el proceso mantendrá sus vuelos, aunque con el recorte de algunas rutas.
JAL evitó difundir sus previsiones de resultados para todo el año fiscal 2009, que termina en marzo, ya que para ello haría falta conocer detalles del plan de reestructuración "que todavía no se han decidido".
