María de los Ángeles del Sagrado Corazón de Jesús Trujillo Martínez (Angelita), resalta en el libro Trujillo, mi padre, la figura del pelotero Felipe Rojas Alou. También, la importancia que tuvo para el desarrollo de una mente sana y un cuerpo sano la obligatoriedad de practicar los deportes en los planteles escolares.
En las páginas 157 y 158, la hija menor del tirano Trujillo explica el respaldo de su padre a la educación, la educación física, los deportes y la fundación del Comité Olímpico Dominicano (COD).
Sobre estos temas expresa: “El gobierno construyó en La Romana un magnifico Palacio Escolar con capacidad de 2000 estudiantes. Se fundó la Junta Pro-viviendas para los maestros del Departamento.
“Cuerpo sano, mente sana-, se creó un Comité Nacional de Educación Física integrado por un presidente y siete vocales y se introdujeron los deportes como una materia obligatoria en todos los programas de estudio. Como resultado, las escuelas fueron dotadas de aquellos amplios y bien equipados gimnasios con canchas deportivas bajo la supervisión de calificados profesores de atletismo. Estos programas fueron sementeras donde se formaron muchos atletas que, en arenas internacionales lucieron sus camisetas deportivas con el logo tricolor de nuestra enseña”.
“Debido al auge deportivo, se formó entonces –la Dirección General de Deportes- y posteriormente el gobierno envió al Congreso un mensaje proponiendo los primeros Juegos Olímpicos Nacionales. Así nace el Comité Olímpico Dominicano. El Comité organizaría todas las federaciones deportivas y ofrecería asistencia a nuestros deportistas. Mi primo Luís Ruiz Trujillo, devoto de la equitación, fue su primer presidente”.
“El Comité Olímpico Nacional daría impulso adicional a la juventud para involucrarse más en las competencias deportivas. Me cuenta Luisito que tan pronto le fue posible, solicitó la aceptación del Comité Olímpico Dominicano (COD), al Comité Olímpico Internacional (COI). Este organismo envió un delegado a fin de evaluar nuestros méritos a tal efecto’.
“Durante su estadía en el país, sostuvo entrevistas oficiales y privadas acerca del espíritu deportivo en el país”.
“Concluidas sus obligaciones el COD le ofreció un esplendido bufe en el Night Club de La Voz Dominicana. El coronel Evangelista Cabrera fue su edecán por los días que estuvo en el país. Fuimos debidamente aceptados como miembros de la COI a tiempo para participar en los juegos internacionales que se llevaron a cabo en la República Mexicana en el año 1954. Luisito no pudo asistir, pero en su lugar viajó el señor Humberto Gómez Oliver, director general de deportes”.
“Un dato curioso es que como jardinero central del equipo de pelota que nos representó, se lució el que ya era una estrella Felipe Rojas Alou, como miembro del equipo de Voiley Ball femenino, figuraba otra gran estrella, Maritza Paulino nativa de la ciudad de Santiago, posteriormente esposa de nuestro buen amigo el señor Víctor Sued, quien fuera también otro gran basquebolista. Era impresionante ver a Víctor jugar por aquellos años, en el campo de la escuela Nacional de Santiago”.
El libro recoge temas variados desde el humano, cultural, deportivo, militar, político y gubernamental.