Berlín.- La Bolsa Internacional de Turismo de Berlín (ITB) abre hoy sus puertas con previsiones esperanzadoras que apuntan a que lo peor de la crisis económica y financiera mundial y sus efectos sobre el sector han pasado.
"Acabamos de dejar un año difícil, pero ya hemos superado el punto en que tocamos fondo. Las cifras muestran que crece la demanda para las vacaciones de verano y que nos encontramos, por tanto, al comienzo de una década esperanzadora", dijo hoy el presidente de la Asociación Alemana de Turismo, Klaus Läpple, en la rueda de prensa de apertura.
La crisis de los últimos dos años ha impulsado la competencia entre los países y operadores, con una clara tendencia a ofertas que saben compaginar calidad y precio, explicó Läpple.
A la larga sólo podrán seguir compitiendo en el mercado aquellos países que se hayan adaptado a la demanda de calidad que tiene el turista de hoy.
En la práctica eso significa, dijo Läpple, que los países turísticos deberán modernizar sus infraestructuras y los establecimientos hoteleros, sus habitaciones y facilidades.
"Los aeropuertos, puertos y estaciones son la puerta de entrada, la tarjeta de visita de una nación. Lo mismo ocurre con los hoteles. La última impresión antes de dejar un país es fundamental. Nadie quiere regresar a casa estresado", añadió.
Pese a que en 2009 los operadores turísticos alemanes sufrieron un retroceso de su facturación del 20,8 por ciento, los viajes en sí sólo decrecieron un dos por ciento, lo que demuestra que el turista no quiere prescindir de sus vacaciones.
La caída de la facturación se debe fundamentalmente a que la mayoría de agencias y hoteles se adaptaron a la crisis con ofertas más baratas.
Las previsiones para este año se presentan más halagüeñas: "somos más optimistas, aunque no estamos eufóricos", dijo Läpple, quien añadió que todo apunta a que el negocio turístico no se normalizará hasta 2011.
España siguió siendo en 2009 el destino favorito de los alemanes en el exterior, seguido de Italia y Austria, si bien la competencia desde el Mediterráneo Oriental es cada vez más potente.
"Turquía y Egipto son dos países con varios puntos importantes a su favor: ofrecen una infraestructura moderna, una amplia gama de complejos hoteleros que ofrecen todo incluido, así como una elevada calidad a muy buen precio", señaló Läpple, quien alentó a otros países a seguir este ejemplo.
El presidente de la Asociación Alemana de Turismo no cree que la crisis presupuestaria de Grecia vaya a tener un impacto negativo sobre el turismo hacia ese país, básicamente porque los problemas no afectan directamente a los viajeros.
No obstante, advirtió que los turistas que viajen por el país heleno se encontrarán con precios más altos -el plan de ajuste griego contempla un aumento del IVA del 19 al 21 por ciento- y recomendó que para evitar un impacto en sus bolsillo opten por ofertas de operadores en lugar del turismo individual.
Entre los destinos lejanos que más pujan en el mercado figuran Tailandia, Mauricio e Indonesia; y en alza continúan además los cruceros.
La ITB se presenta este año nuevamente con cifras récord: 11.127 expositores de 187 países en una superficie de 160.000 metros cuadrados.
México y los países de Sudamérica cuentan con uno de los pabellones más grandes de la feria, al igual que el área caribeña, que contará con un amplio espacio para albergar los 35 que allí se colocarán.
España, que comparte pabellón con Andorra, también cuenta con un gran espacio en la ITB, donde se plantearán las ofertas que las comunidades autónomas más turísticas ofrecerán durante 2010.
Un aumento de la presencia de pabellones que ofrecen viajes especializados para la comunidad gay, experimentar la vida nómada de los mogoles o nuevos servicios turísticos a través de los móviles son las principales novedades que presentará esta feria.
El país invitado este año es Turquía, que bajo su lema "Turquía fascina" intentará plasmar en sus 3.600 metros cuadrados la multiculturalidad del país, así como su música, su folclore y una variedad de especialidades culinarias. EFE