Durante los meses de marzo y abril una organización mafiosa dentro del Consejo Estatal del Azúcar (CEA), e invasores de terrenos quemaron miles de tareas desde Hato Viejo, Cruce de Boca Chica, San Pedro de Macorís, en el Este y en el ingenio Barahona, en el Sur.
Esta acción criminal tiene un mismo modo operando: Hombres con armas de fuego cortas, largas, en motores y encapuchados prenden los cañaverales los fines de semana.
Los días lunes siguientes a la quema se presentan para ocupar los campos de caña.
Estos invasores profesionales dicen ser oficiales de las instituciones militares, policiales y civiles con poder, según ellos.
Cuando alguna autoridad se presenta para investigar las ocupaciones de los terrenos muestran supuestos recibos de pago al CEA por compra de terrenos a un valor de dos, tres y cincos mil pesos la tarea.
Estos malandrines, algunos amparados en las banderas de los partidos en campaña pagan el 35 por ciento de 40 tareas y cercan mil tareas. Otros pagan por cien y cercan tres mil tareas.
Estas maniobras las coordinan con personal oficial del CEA que se presentan a medir y entregar los terrenos, dejando que midan y cerquen a sus antojos no importa la extensión aunque el papel diga lo contrario.
Lo peor de todo es que los campos de caña quemados en Hato Viejo, San José, La Gina y San Pedro de Macorís, son privados que el CEA lo tiene en arrendamientos.
Tal es el caso de la familia Hichez, propietaria de 35 mil tareas de tierras reconocidas por el CEA, y que en 2004, entregó mediante una certificación 8 mil tareas, en la parcelas 550, 550-B, 551y 551-B todas con sus títulos.
Estos terrenos están cercados por los nuevos dueños surgidos al amparo de la mafia quema caña que opera en el CEA y fuera de esta institución, que debería estar llamada a proteger la propiedad pública y privada.
En estas operaciones, todas fraudulentas amparadas por la fuerza, existen los autores fácil de identificar, apresar, interrogar y someter a la justicia. Basta pedirle a cada uno de los ocupantes que muestren los papeles para ir donde los funcionarios del CEA que hicieron estas ventas a un precio mil lleno de favoritismo.
Los terrenos de Hato Viejo, a Gina, San José y San Pedro de Macorís, son turísticos por la cercanía a Boca Chica, Juan Dolio y otros polos turísticos. Vender la tarea a dos, tres y cincos mil pesos es una burla al patrimonio de la naciòn.
El Jefe de la Policía Nacional, Mayor General Rafael Guillermo Guzmán Fermín, una vez enterado de la quema de los cañaverlaes se presentò en varias oportunidades a estos lugares disponiendo una investigaciòn y ordeno apresar para someter a la justicia a quienes se dedican a esta actividad delictiva que el presidente de la Unión Nacional Azucarera (UNAZUCAR), calfica de terrorista.
El señor José Heredia, presidente de UNAZUCAR denunciò que en el ingenio Barahona, un fin de semana quemaron 50 toneladas de caña.
La zafra pryectada para este año es de 500 mil toneladas.
En el Este (Hato Viejo, La Gina, Cruce de Boca chica, y San Pedro de Macorís) quumaron, segùn los moradores màs de 500 campos de caña.
El señor Heredia hizo “un llamado a la intervenciòn de las autoridades de la seguridad y el orden en todo el paìs, para que se investiguen los hechos que rayan ya en actividades terroristas, para que los responsables sean detenidos y traducidos a la justicia para que los implicados sean castigados con todo el rigor de la ley”.
Esto es lo que hay que hacer frente a estos asaltantes de tierras ajenas, que no solamente ponen en peligro la seguridad, el suministro de azucar, sino un convenio internacional con inversionistasd brasileños que durante la visitta del presidente Leonel Fernández Reyna, tienen enb proyecto instalar en la regiòn Este, especificamente en la zona de Hato Viejo y Bocha Chica, una refenerìa de etanol. El presidente Fernández Reyna empeño su palabra.
El jefe de policìa Guzmán Fermín ha actuado con responsabilidad y firmeza sometiendo a 30 personas por quema de caña. Corresponde ahora a la jujsticia aplicar la ley como lo demanda el señor Heredia presidente de UNAZUCAR.
Tanto la familia Hichez como Bisono, han sido victimas del vandalerismo de los que queman caña para invadir terrenos ajenos.
Urge que el CEA asuma su responsabilidad y muestre al pais la lista e las ventas de terrnos a precio de vaca muerta en la regiòn Este, y porque no cumple una sentencia de un tribunal sobre terrenos vendidos a terceros en areas jurisdicional de Autoridad Portuaria que estàn en los antigujos cañaverales.
El patrimonio pùblico no puede ser enajeado de esa manera y la constituciòn de la República, es lo bastante claro referente a la propiedad oficial y privada.
Urge una meticulosa, responsable, trasparente y firme investigaciòn de estos hechos para erradicar esta organización gasteril.
Llamamos al presidente Fernández Reyna para instruya en este sentido sin favoritismo ni contemplaciones.
Actúe presidente: LIMPIE EL CEA DE ESTA GANGA QUE NO TIENE NADA QUE ENVIDIARLE A LA BANDA DE Al capone en Chicago.