El señor Wacar Gómez lleva 15 días en huelga de hambre en protesta para que el gobierno y los representantes del Congreso Nacional apoyen unas series de medidas que son prioridades para el pueblo.
Gómez inició su huelga de hambre en la provincia de San José de Ocoa; donde fue maltratado por miembros de la policía municipal de este municipio para que abandonara el parque central de esta ciudad.
Reveló que con ayuda de algunos amigos se traslado a la cuidad de santo Domingo para desde aquí llevar su lucha pacífica.
El doctor está ubicado en la calle Seibo # 86 de villa Juana frente a la escuela República Dominicana, donde se encuentra desde hace cinco días.
Dijo que lleva 15 días en esta acción que no solo persigue el compromiso del presidente de la República para trabajar en tres problemas:
La elaboración y promulgación de la ley de condonación de deudas para pequeños y medianos agricultores .
La implementación de la ley sobre la comercialización de la producción agrícola nacional con la cual se garantice un mínimo precio a la producción del agricultor dominicano.
La implementación inmediata de la ley constitucional que trata sobre el Ministerio del Defensor del Pueblo. Seleccionando y dando posición a cada miembro, así como proporcionando los recursos necesario para el desarrollo de sus funciones.
El doctor Wacar Gómez manifestó que está consciente de que muchos no están de acuerdo con el tiempo, ni el lugar de esta acción, pero ninguno debe estar en desacuerdo con el reclamo.
“Este reclamo es muy simple y por eso creo ilógico que el presidente me forcé a entregar la vida”, indico Wacar Gómez
Afirmó que lo más fuerte de esta acción no violenta ha sido recibir las críticas y la resistencia de aquellos que me quieren y me aprecian.
Añadió que quienes en vez de hacer el mayor esfuerzo para que el presidente responda prefieren pedirme que levante la huelga.
Citó al maestro Gandhi cuando éste decía: “las huelas de hambre no se hacen para llamar la atención, sino para conquistar un objetivo”.
Aseguró que a pesar de que se siento con la fortaleza suficiente, sé que soy solo un ser humano mortal como otro cualquiera.
Sostuvo que a partir de este momento su tiempo se está reduciendo cada segundo.
“Por esto les pido hacer todo lo que esté en sus manos para que no suceda lo que ustedes y yo lamentaríamos”, exclamó Gómez.