Unos 137 países registran distintas formas de explotación a través de la trata de personas. De los 2,4 millones de víctimas en los años 1995 y 2004, el 80% era mujeres y el 50% niñas, niños y adolescentes, según trascendió en el taller para periodistas: Herramientas para informar sobre Trata de Personas, realizado este jueves en el Ministerio de Relaciones Exteriores, con la presencia de su viceministra Rosario Graciano de los Santos.
En la República Dominicana no existen cifras exactas sobre el número de mujeres, hombres y menores que han sido objeto de la trata de personas; pero, aunque el Estado ha ejecutado planes de acción al respecto, al igual que contra el tráfico ilícito de migrantes, aún se consideran insuficientes y deben incorporarse a este enfrentamiento instituciones públicas y sectores que instrumenten investigaciones sobre causas, consecuencias, dimensiones del fenómeno, así como la ejecución de campañas y estrategias de capacitación.
En tal sentido tuvo lugar este jueves el taller para periodistas, organizado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), la Comisión Interinstitucional de Combate a la Trata de Personas y el Tráfico Ilícito de Migrantes (CITIM) y el Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX), a fin de sensibilizar y capacitar a quienes deben tratar el tema con determinadas normas de conductas y seguridad hacia la víctima y consigo mismo; a la vez que proyecten un enfoque humano, no sensacionalista sobre este fenómeno global, que enriquece y nutre cada vez más a redes criminales e individuos sin escrúpulos en el mundo.
La oficial de Programas de la OIM, Gina Gallardo, estableció las diferencias y semejanzas entre el tráfico de migrantes y la trata de personas; en tanto que las destacadas periodistas María Scharbay y Edith Febles expusieron sus experiencias y sugirieron algunas de las herramientas claves para entrevistar a víctimas de tan infame flagelo que viola los derechos humanos de más de 800 mil personas anualmente, mediante la trata internacional, sin contabilizar aquí la trata interna.
