Palma de Mallorca (España).- Los hoteleros de Baleares estudian medidas para evitar que los jóvenes turistas que se hospedan en sus establecimientos salten de un balcón a otro o a la piscina, una práctica que ya ha ocasionado la muerte de ocho personas en estas islas españolas.
Este tipo de accidente se produce todos los veranos desde hace años, especialmente en Mallorca, Ibiza y en las zonas de residencia de los turistas españoles y europeos más jóvenes.
Los hoteleros de Baleares se plantean nuevas medidas, como la difusión de un vídeo para concienciar del peligro que acarrea esta práctica, según dijo a Efe el presidente de la Federación Hotelera de Ibiza, Juan José Riera.
Admitió estar "muy preocupado" por estos saltos, que en algunas ocasiones se han cobrado la vida de los que los practican.
Riera, al igual que la gerente de la Federación Hotelera de Mallorca, Inmaculada de Benito, advirtió de que casos de jóvenes que saltan balcones los ha habido siempre pero ahora se les da más publicidad al grabarlos en vídeo y emitirlos.
Los hoteleros de Baleares han tratado el asunto con los principales touroperadores y han tomado medidas preventivas para dificultar que se suban a los balcones.
La principal actuación que ha llevado a cabo el sector ha sido aumentar la altura de las barandillas, incluso por encima de los 1,05 centímetros exigidos, llegando al 1,10 o 1,20 u optando por balcones casi cerrados.
De Benito explicó que lo más habitual es que estos accidentes se produzcan al tratar de pasar al balcón del apartamento vecino, ocupado por otros amigos, novias o conocidos estando generalmente bajo los efectos de las drogas o el alcohol. EFE
